Te da miedo. Sufres cada vez que tienes que ir al dentista. Incluso retrasas las citas y revisiones poniendo en peligro tu salud dental. A tu hijo le aterra acudir al dentista o monta pataletas cuando llega el momento. Este es tu post. Te dejamos a continuación varios consejos que harán que visitar a tu dentista deje de ser un trastorno para ti o para los tuyos.
Según Karen Coates, asesora dental de la Fundación Británica para la Salud Dental, algunos le tienen tal fobia al dentista que no lo han visitado en años. «Hace tiempo los métodos que disponían los dentistas para realizar su tarea no eran satisfactorios y provocaban dolor», apunta Antonio Bujaldón(de la SEPA). «Esto –asegura- ha hecho que una gran parte de los pacientes que tienen pánico al dentista sean personas mayores que pasaron por malas experiencias en sus visitas al dentista».
Según el estudio realizado por Ríos Erazo y Col.¹, sería necesario promover la comunicación dentista-paciente. Se puede hacer por medio de la entrega de información respecto a cuales serán los procedimientos dentale. Esto llevaría a disminuir la sensación de pérdida de control.
A su vez, un 89% de los pacientes consideró que la música de fondo los ayudaba a relajarse. La distracción tiene como objetivo manejar la ansiedad, el estrés y el dolor que provocan los procedimientos clínicos. Esto ocurre mediante la focalización de la atención fuera de las intervenciones, siendo la música una forma de distracción.
En España hay poca información al respecto. Salvo alguno estudios relevantes, la mayoría van dirigidos a los pacientes y consejos para dejar de tener miedo al dentista. Pero pocos concretan las causas del origen de dicho miedo. Dejan patente que la fructífera visita al dentista es cosa del paciente y del profesional. Éste ha de crear una relación cercana, informativa y afable.
Según J.A. Márquez-Rofríguez² ,en su estudio sobre los miedos al dentista, se identifican cuatro dimensiones o aspectos que podrían diferenciarse y que constituirían respuestas al interrogante de por qué se le teme al dentista.
Dos de estos factores generan un bajo grado de temor. Son los denominados como » aspectos no profesionales y aspectos inherentes al tratamiento». Sin embargo, los otros dos factores sí provocan temor en cierta medida. Son los llamados » trato humano» y » mala praxis profesional» .
Según este estudio » el principal temor de los pacientes se centra en lo que se ha denominado una mala praxis profesional». Es decir -aclara Márquez-Rodríguez- » que los pacientes temen que como consecuencia del tratamiento dental se le produzca algún tipo de daño, tales como la rotura de los labios, las heridas en la boca y el sangrado de la misma, lo cual se vincula a la poca delicadeza del dentista en su práctica».
Otro de los aspectos que suscitan temor en los pacientes, aunque en menor medida, son los que tienen que ver con el trato humano. Éste expresa el temor ante la posibilidad de ser atendido por un dentista que esté de mal humor, que le riña, que sea maleducado, o que sea brusco. También le afectaría si el personal de enfermería es desagradable, y el supuesto de ser tratado junto a otros pacientes a la vez.
Consejos para aliviar el miedo al dentista en los niños.
Si es la primera cita, es recomendable que el niño conozca previamente a su dentista. En todas las consultas hay un especialista dedicado a los niños. Se llama odontopediatra. Y se ocupará de enseñarle el sillón, el material, el ambiente en la clínica. Todo con el cariño y la atención que merecen.
Porque como hemos visto, uno de los factores más importantes a la hora de evaluar el miedo percibido por el paciente es que el dentista sea brusco o maleducado.
Aprovecha cuando tengas que ir al dentista, para que tu hijo te acompañe. Así podrá ver qué te hacen, ver que no es algo malo. Así podrá generar confianza evitando posibles temores. Algo importante en esta situación es evitar comentarios relativos al dolor, sangrar, cortar,etc . Ni siquiera es aconsejable frases del tipo «NO TE VA A DOLER», «NO TE PREOCUPES SI SANGRAS UN POCO». Hay que evitar ese tipo de frases porque ya estás dando por hecho que puede suceder.
Tú eres su mejor ejemplo . Muchos de los miedos que adquirimos de pequeños son aprendidos por modelado. Es decir, reaccionamos como vemos que reaccionan a nuestro alrededor puesto que nos dicen que ESO es peligroso.
La mayoría de las veces en consulta es aconsejable que los niños entren solos. En ocasiones somos los padres los que les ponemos más nerviosos, o reflejamos caras de asco o rechazo que a ellos les condiciona sobremanera.
«Que el miedo no atenace tu salud dental»
Consejos para aliviar el miedo al dentista en los adultos.
Al igual que en el caso de lo niños, puedes acudir previamente a tu primera cita para conocer la clínica, el equipo profesional y así lograrás reducir tu nivel de ansiedad el día de la cita.
También puedes planificar una primera cita de revisión. Que en tu primer contacto con tu dentista no haya que hacer nada complicado ni extenso.
Si aún así sigues sintiendo que no llegas a relajarte y sientes ansiedad, puedes llevarte música para no escuchar los ruidos típicos del torno, y demás «sonidos de dentistas».
Acuerda con tu dentista un signo como levantar la mano cuando quieras indicarle algo.
Y por último, pero quizá el más importante de todos. Habla de ello. Ya seas tú o tu hijo quien lo padezca, deja claro a tu dentista que sientes ansiedad, angustia, nervios o cualquier sensación desagradable.
http://psicomadridcentro.es
Carlos Melchor. Psicólogo (nºCol.M-18384)
¹ Ríos Erazo M, Herrera Ronda A, Rojas Alcayaga G Ansiedad dental: Evaluación y tratamiento . Av. Odontoestomatol 2014; 30 (1): 39-46.
² Márquez-Rodríguez JA, Navarro-Lizaranzu MC, Cruz-Rodríguez D, Gil-Flores J. ¿Por qué se le tiene miedo al dentista? RCOE 2004; 9 (2):165-174.
Deja una respuesta